Anteproyecto de un nuevo Centro Social-Vecinal realizado como parte del equipo de Bestraten Hormias Arquitectura, colaborando en la concepción del mismo y la realización de los planos y visualizaciones necesarias. Se trata de un pequeño pabellón-equipamiento que se construiría como acompañamiento y complemento a un pequeño parque y dos campos de fútbol en una urbanización de baja densidad tipo ciudad-jardín.

El proyecto alberga una pequeña cocina con barra hacia el exterior desde la que se pueden servir refrescos y tentempiés a las familias que hacen uso del resto de instalaciones. Además, cuenta con una modesta sala para organizar reuniones en su interior o pequeños eventos veraniegos que amplían el espacio hacia el exterior bajo el gran alero asimétrico abriendo una serie de ventanales. Se concibe la construcción empleando una solera de hormigón sobre la que pueden reposar gruesos muros de tapial -tierra arcillosa compactada dentro de un encofrado para lograr muros portantes- y el esbelto entramado que es la estructura de paneles de madera laminada. El empleo de estos materiales, junto con el aluminio que compone los ventanales y otras aberturas, se debe a que son renovables, reutilizables y/o reciclables